martes, 23 de febrero de 2010
El lamento de Dido (I)
"Es la muerte de Dido, en la ópera Dido y Eneas de Purcell. Si quieren mi opinión: la obra de canto más bella del mundo. No es sólo bella, es sublime, y lo es por un encadenamiento increíblemente denso de los sonidos, como si los ligara una fuerza invisible y como si, a la vez que se distinguen, se fundieran los unos con los otros, en la frontera de la voz humana, casi en el teritorio del lamento animal pero con una belleza que no alcanzarán jamas los gritos de los animales, una belleza que nace de la subversión de la articulación fonética y de la transgresión del empeño que suele poner el lenguaje verbal en distinguir los sonidos"
(La elegancia del erizo: Muriel Barbery)
Thy hand, lovest soul, darkness shades me,
On thy bosom let me rest.
When I am laid in earth
May my wrongs create
No Trouble in thy breast.
Remember me, remember me,
But ah¡ forget my fate.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
No lo dudo Moises, te aseguro que jamás me habia parado mas 2 minutos a escuchar una opera, y es que el dia que oiga una entera, quisiera hacerlo "in situ" en la Opera propiamente dicha, sentirla alli, porque para mi, que soy totalmente profana en el tema, pienso que si me gusta de verdad, me va a gustar allí y a partir de ese momento la podré saborear plenamente o perder el interés para siempre. Que conste que voy por el minuto 6:58 en el momento de escribirte estas palabras, pero... :)
Biquis
jejeje, Merce, espérate a la siguiente entrada que voy a preparar, que está relacionada con esta...jejejej te sorprenderá...
besos guapa
El mejor libro que he leído en mucho tiempo!!! Gracias por traerlo aquí. La música, una maravilla, claro.
Gracias por El Lamento, Moisés. El libro, para otro momento.
Que sea buena noche.
Publicar un comentario